La producción de aceite de oliva virgen extra lograda por las variedades que forman parte del ensayo de secano que Todolivo tiene en la finca ‘El Camarero’ (Córdoba), Arbequina i-21, Arbosana i-43 y Koroneiki i-38, ha sido muy buena si se tiene en cuenta que 2016 ha sido un año en el que la pluviometría ha estado, con 406 l/m2, por debajo de la media anual para esta zona de la campiña, que está en 515 l/m2.
Las tres han mostrado buena tolerancia a la sequía, aunque la capacidad de recuperación es mayor en variedades que no son tan tempranas como Arbequina i-21. De hecho, la variedad Arbosana i-43 ha soportado mejor la falta de agua que el resto produciendo un 35% más de kilogramos de aceite por hectárea que la variedad Arbequina i-21 y ha tenido un rendimiento graso del 20,05%. Su capacidad de recuperación ha sido mayor que el resto.
Y ello a pasar de que a las tres variedades se les aplicó la misma estrategia de poda intensa en previsión de un año en el que la pluviometría iba a ser escasa, como así ha resultado ser 2016 en esta zona de la campiña cordobesa. Sin embargo, a pesar de que ha bajado la producción de kilogramos de aceitunas cosechadas, la campaña ha ofrecido unos excelentes resultados de los rendimientos grasos de estas tres variedades.
El rendimiento graso de Koroneiki i-38 ha sido de un 23,27% y de la variedad Arbequina i-21, de un 21,82%. Unos datos que convierten a las tres variedades que forman parte de este ensayo en aptas para ser plantadas en fincas de secano.
A lo largo del ensayo las tres variedades han mantenido un productividad elevada y constante, siendo koroneiki i-38 con una media de 1.338 kilógramos (Kg) de aceite virgen extra por hectárea (ha), la más productiva, seguida muy de cerca por Arbosana i-43 con 1.207 kg/ha y de Arbequina con 1.133 kg/ha (Ver tabla adjunta).