La Rinconadilla es historia viva de la olivicultura moderna. Pasear por ella, no solo es un disfrute para los sentidos, sino que nos permite tambien visualizar y analizar la evolución del Olivar en Seto. En ella conviven dos concepciones diferentes de este sistema de cultivo. Una más antigua, de marco espeso, plantada hace once años con una densidad de 1.975 olivos/ha y

otro más moderna y actual, de marco amplio, plantada en abril de 2014 con una densidad de 1.143 olivos/ha. Como se puede observar en los cuadros de producción 1 y 2, la media productiva acumulada es mayor en la parcela de marco amplio, que supera a la de marco estrecho en 254 kg aceite/ha. Ahora bien si sumamos y comparamos el aceite producido en

los cuatro primeros años en ambas parcelas, esta diferencia se acrecenta aún más, ya que la de marco amplio ha producido en este periodo 967 kg aceite/ha más que la de marco espeso.
Pero no es solo una cuestión de kg sino también de rentabilidad. La parcela de marco amplio ha necesitado un 42% menos de inversión y sus costes de manejo del cultivo son inferiores en un 35% a los de la parcela de mayor densidad, debido a que, al tener un menor número de filas de olivos, se produce un menor consumo de agua, menos árboles que podar, tratar, recolectar, etc. Esto permite al agricultor producir en esta parcela AOVEs de una forma más eficiente y obtener mayores beneficios.
En lo agronómico, el manejo del cultivo en la parcela con mayor amplitud de marco es más sencillo y natural: los olivos disponen de un mayor espacio para expresarse y desarrollarse convenientemente, lo que posibilita que se les pueda aplicar una poda natural inspirada en el olivar tradicional, que favorece el desarrollo del follaje productivo en su interior y que permite que las ramas queden bien insoladas y aireadas.

De esta forma se consigue que los olivos puedan captar la luz de una forma más eficiente y que todos los años se puedan obtener rendimientos y producciones elevadas.

Cabe recordar que el Olivar en Seto de marco amplio es una evolución desarrollada por Todolivo que la empresa personaliza en cada finca, en función de sus condiciones agroclimáticas y que junto con la poda natural que se le practica, posibilita que los agricultores alcancen producciones altas y regulares todos los años y produzcan AOVEs de una forma más eficiente, sostenible y rentable.